En una entrevista reveladora, Victoria Lago, quien ha capturado al público con su interpretación de Julia en La Promesa, comparte las realidades detrás de su pasión por la actuación. A sus 9 años, Victoria ya sabía que quería ser actriz, una ambición que la llevó desde los teatros infantiles hasta la prestigiosa escuela de Cristina Rota y luego al vibrante mundo de Londres. Con su talento, ha sabido perseverar y encontrar belleza en cada “sí” que llega tras los inevitables rechazos.
Victoria describe a Julia, su personaje en La Promesa, como una viuda de la Primera Guerra Mundial con una fortaleza y sensibilidad únicas, lo que plantea un desafío creativo que la mantiene en constante evolución. “Actuar en series diarias es un ejercicio de adaptación continua”, explica, compartiendo cómo elementos como el vestuario y el contexto histórico le ayudan a sumergirse por completo en la época y en la historia.
Sin embargo, no todo es romance con la profesión. Victoria revela la importancia de una buena salud mental y de contar con una red de apoyo sólida entre compañeros. En una industria que a menudo se siente como una montaña rusa, la empatía y la solidaridad juegan un papel crucial. Para ella, el éxito de un compañero nunca es motivo de comparación, sino de inspiración.
Mirando hacia el futuro, Victoria sueña con diversificar su carrera y explorar otros géneros como la comedia. Su anhelo de volver a las tablas del teatro y participar en proyectos que cuenten historias femeninas auténticas son prueba de su compromiso con una industria en cambio. La Promesa es solo el comienzo de una trayectoria que busca no solo entretener, sino también inspirar y representar mujeres reales y complejas, tanto en la pantalla como fuera de ella.