El joven volvió inesperadamente de la Guerra del Rif contra Marruecos, pero lo hizo con graves secuelas físicas, algo para lo que Mario García, actor que encarna al interés amoroso de una de las doncellas del palacio, María (Sara Sánchez), tuvo que prepararse muy a conciencia y cambiar completamente su cuerpo, lo que el propio actor evidenció a través de sus redes sociales, donde explica con detalle como fue el proceso.
Perdió 12 kilos en apenas un mes
Mario García publicó en su perfil de Instagram un post con varios momentos clave de este profundo proceso de adelgazamiento. “He estado durante un mes y medio bajando de peso hasta llegar a los 62 Kg, 12 kilos menos de lo que pesaba”, decía el actor madrileño en su publicación, donde deja ver que el 11 de enero pesaba 74 kilos.
“Para mí la interpretación no es simplemente llegar y decir un texto, es algo muchísimo más complicado que eso. Es mi trabajo y es mi vida. Me encanta encarnar un personaje hasta las últimas consecuencias”, escribía el propio García en referencia a un Salvador que regresa del continente africano con severas secuelas corporales y mentales: “Quería reflejar la crueldad, la injusticia y el aspecto tan descorazonador de una guerra”.
Las graves secuelas
Las secuelas que deja la guerra a las que se refiere el actor se pueden ver en el comportamiento de Salvador, que regresó a Córdoba repleto de sentimientos negativos que proyecta incluso hacia la propia María, que había sido su gran amor antes de que viajase a Marruecos como soldado del ejército español.
Eso sí, tal y como se ha revelado en uno de los últimos capítulos de la serie de Bambú Producciones, Salvador tiene una posibilidad de recuperar la visión en su ojo izquierdo, además de poder dejar atrás sus constantes arrebatos de ira, aunque para lograrlo deberá esforzarse mucho, todo ello sin tener la certeza absoluta de una recuperación plena.
Otras ficciones de época
El actor de 25 años, nacido en Leganés, no es ajeno a las ficciones de época. En la novena temporada de Amar es para siempre, una serie que se acerca a su final, interpretó a Tito, el hijo de Beltrán (Joseba Apaolaza) y que durante años se creyó que era el asesino de Marisol, la hija de Manolita, aunque tras su regreso de Londres se desveló que había sido su propio padre, que finalmente también lo mató.
Pero además de participar en la ficción de Antena 3, también ha aparecido en otra serie de época, Los pacientes del doctor García, la adaptación de la novela de Almudena Grandes que se pudo ver, precisamente, en La 1.