Dicen que en el amor y en la guerra todo vale… y Digna esta semana pondrá en práctica esto último. La mujer se acercará a Don Pedro y aprovechará su interés en ella con el único propósito de hundir a Jesús, algo que Damián parece no estar dispuesto a hacer a pesar de que podría arruinarles el negocio… pero Jesús encuentra una sorprendente salida…
Luis considera una imprudencia que su madre haya enviado a Gema a espiar a Jesús, pero su perspectiva cambia cuando Gema regresa con información valiosa para los Merino. Sin embargo, Gema desconoce que Jesús la descubrió espiando detrás de la puerta de su despacho.
Tasio se esfuerza en cumplir con su nuevo rol de encargado, pero las demandas de Marta lo sobrepasan, dejándolo desorganizado. Animado por los consejos de Digna, Joaquín decide apoyarlo, ofreciéndole ayuda tanto en el trabajo como para ganarse la confianza de Marta.
Damián se ilusiona al ver que Marta ha aceptado su regalo, creyendo que esto lo acerca a ella. Sin embargo, Isidro piensa que Damián intenta comprar su cariño y que la reconciliación con sus hijos es poco probable, lo que lleva a Damián a cuestionar la sinceridad de sus propios sentimientos.
Mateo le cuenta a Claudia cómo su padre gestionó la obtención de la dispensa papal, desconcertado por la actitud cambiante de Don Pedro. Claudia lo ayuda a entender la difícil posición de su padre y lo anima a asistir a la fiesta en honor a su madre.
Joaquín agradece a Luz por ayudar a que todos reconozcan a Julia como hija de Valentín y le expresa que ya forma parte de la familia. Le entrega también una carta de Blanca, que tendrá un impacto decisivo para ella.
María y Víctor regresan de un paseo divertido por Toledo, y ella lo invita a hospedarse en la casa de los De la Reina. Luego, confiesa a Gema que Víctor siempre ha estado enamorado de ella, y Gema sugiere que lo aproveche para acercarse nuevamente a Andrés.
Miriam se siente molesta con Joaquín tras su último encuentro con Gema y lo confronta, comprometiendo así la buena relación que existía entre ambos.
Luis investiga el nombre que Gema le dio, descubriendo que Jesús no solo pretende abrir el balneario de Gervasio, sino que también planea lanzar una línea de cosméticos para competir con ellos.
Marta, tras aceptar el obsequio de Damián, empieza a creer que su padre ha cambiado y acepta su relación con Fina. Pero Andrés es más escéptico y duda que un cambio así sea tan fácil.
Luis y Joaquín intentan detener los planes de Jesús sin exponerse, mientras Digna plantea una estrategia aún más compleja, sorprendiendo a sus hijos con su astucia.
Luz, angustiada por su futuro como médico, encuentra respuesta cuando Alberto le revela el verdadero motivo de su llegada a la colonia.
Julia tiene un desmayo ante Damián y Digna, además de sufrir pesadillas constantes. Begoña, preocupada, empieza a entender la causa detrás del trauma de la niña.